4.04.2012

Salir del Edén (1999)


Vivir en el Paraíso, abrazar lo conocido, lo limitado, lo que ya tiene forma, lo que no te pide que intervengas en lo absoluto… lo que no exige nada. Abrazarlo y sonreír satisfecho  ante lo estático.
Cada día igual, cada instante secuela del  anterior.
En tu mundo plano estás seguro,  lo sientes.
Y  aunque a veces te preguntas si habrá algo más… aplacas esos “planteamientos absurdos”  para hundirte en el cómodo sofá de tu Edén, mientras ves la televisión.
Duermes y eres “feliz”.
…una tarde cualquiera,  Lilith, quien tarde o temprano se presenta irrumpe violentamente y te despierta…
Abre tus ojos a la fuerza, para que veas la grieta que ha hecho en tu mundo perfecto, solo para demostrar que tus ”inadmisibles intuiciones” de un “algo más” eran más que eso…
Demoniaca, te confronta y te incita a morder la manzana, mientras tú te debates penosamente entre el Edén y el Caos.
Miras aterrado de reojo aquello que se presenta amorfo e infinito…
Puedes elegir por primera vez… pero estas muerto de miedo…
Aún no sabes que en el mundo del Caos tú creas tu propio orden, que la expulsión del Paraíso, es solo el primer paso del satisfactorio camino del auto descubrimiento…
No lo sabes y por eso estas temblando detrás del sofá, mientras Lilith balancea la manzana ante tus ojos…
Hastiado de la presión inmensa que su propuesta ejerce, con el corazón a punto de estallar, la ahuyentas en un arranque furioso y se aleja… tal vez para nunca más volver…
Ahora se ha ido y estás más tranquilo.
Respiras profundo, te sacudes su presencia, intentas olvidar que vino y las cosas que te obligo a ver.
Resanas la grieta, aseguras bien las puertas y ventanas del Edén.
No permitirás que vuelva nunca nadie a intentar engañarte con sus tonterías… estas convencido…
Tratas de volver a dormir, tal vez hasta pretendas que lo haces durante años…
Pero siempre sabrás que te estas engañando.
Si tener conciencia de que hay algo más allá de tu cómodo Paraíso no te levantó del sofá… vives en vano…